- En un importante giro de los acontecimientos, Málaga CF ha anunciado oficialmente la salida de su entrenador principal después de una serie de resultados decepcionantes que han dejado al club al borde de la zona de descenso en la Segunda División española. La decisión llega en medio de una creciente presión por parte de los aficionados y una preocupación generalizada sobre el rumbo del equipo a medida que la temporada se acerca a su final.
El ahora exentrenador, que llevaba poco más de una temporada al frente del equipo, no logró ofrecer la consistencia y los resultados que el club esperaba. A pocas jornadas del final, el Málaga se encuentra peligrosamente cerca de los puestos de descenso, lo que ha generado temores de una segunda caída en solo tres años. La directiva consideró que la situación era insostenible y decidió actuar con rapidez para intentar salvar lo que queda de la campaña.
En un breve comunicado emitido por el club, los directivos agradecieron al técnico por su trabajo y profesionalismo, pero subrayaron que se necesitaba “un nuevo rumbo” con urgencia. “Reconocemos el esfuerzo y la dedicación mostrados, pero los resultados no han cumplido con las expectativas del club ni de su afición”, rezaba el comunicado.
Bajo el mando del técnico saliente, el Málaga no logró encontrar un ritmo de juego, con frecuentes cambios tácticos, un ataque ineficaz y una defensa débil que contribuyeron al declive del equipo. La afición se mostró cada vez más frustrada, especialmente tras las derrotas recientes ante rivales directos por el descenso, que evidenciaron la falta de cohesión y espíritu de lucha del equipo.
El club ha nombrado a un entrenador interino del sistema juvenil para dirigir los últimos partidos de la temporada mientras comienza la búsqueda de un reemplazo permanente. Fuentes internas indican que el Málaga está buscando una figura con experiencia y un historial probado en situaciones de alta presión y lucha por la permanencia.
Mientras el equipo se prepara para una recta final crucial, el enfoque ahora se centra en estabilizar el rendimiento y evitar el temido descenso a la tercera categoría. Con el apoyo apasionado de su afición en La Rosaleda, Málaga CF espera que una nueva voz en el banquillo pueda inspirar una remontada en este cierre de temporada.